Cuarta entrega de la banda de el encumbrado ex guitarrista de MORBID ANGEL, Erik Rutan la que tengo ahora entre mis manos, un Erik convertido por otro lado en reputado productor, atreviéndose incluso con el power metal, como ya demostró con el álbum de debut de CELLADOR, logrando notables resultados pese a ser un campo un tanto alejado de su hábitat habitual.
Tras un más que correcto «I, Monarch», sentía curiosidad más que considerable por ver de que sería capaz Erik tras la ‘desbandada’ general sufrida, tras la cual dejaron la banda el batería Derek Roddy (alego motivos monetarios) y el bajista Randy Piro, pero los recambios no solo cumplen a la perfección, sino que encima dan aún más nombres a esta formación, sobre todo la incorporación del genial bajista de CANNIBAL CORPSE Alex Webster, con quien ya coincidió en el proyecto progresivo/operístico ALAS, pero que cederá su puesto en los directos al habitual Makoto Mizoguchi.
Jade Simonetto se muestra como un batería más que solvente a lo largo de todo el álbum, mientras que la gran sorpresa ha sido la inclusión de un segundo guitarrista, algo que no ocurría desde el primer disco de HATE ETERNAL, donde dicha labor recaía en las manos de Doug Cerrito. Se trata de Shaune Kelley, con quien también coincidió en RIPPING CORPSE, banda que Erik abandonó para unirse a MORBID ANGEL.
Dicho esto… ¿Cómo se entiende que un disco así no esté entre lo más comentado de lo que va de año?, ¿Es acaso mala la producción? No. ¿No suena todo como debiera? No. ¿Se han pasado al power metal?.No. La producción es de lo mejor que te puedes llevar a los oídos dentro de un death metal tan poderoso, Erik toca la guitarra con gracia divina, increíble su labor a las seis cuerdas, el bajo de Alex para nada queda oculto entremedio de esta tormenta sónica, suena con una presencia envidiable muy pocas veces vista en este genero, y la batería de Jade es una maquina perfectamente engrasada y con un sonido excelente.
¿Dónde esta pues el ‘pero’? Hay quien dice que Erik ha dado rienda suelta a sus mas profundos sentimientos tras la muerte de su ex compañero y amigo Jared Anderson, no se si será cierto aunque apostaría por ello, pero lo que si es verdad es que estamos ante un trabajo muy difícil de asimilar, digerir o como queramos llamarlo, en gran parte debido a su complejidad, que se aprecian elementos progresivos que no hacen sino enrevesar más un sonido ya de por si complicado y que toda la banda toca a todo trapo…de continuo.
Hay momentos en los que este «Fury & Flames» no hay por donde cogerlo, y lo digo así de tranquilo porque es lo que hay, tanta velocidad, brutalidad y en demasiadas ocasiones la falta de una melodía clara que seguir no hace sino marear, produce una sensación de vértigo, los temas se hacen demasiados lineales pero a su vez tienen una complejidad en su ejecución que los dejan fuera del alcance de la mayoría de músicos y mortales, en lo que incluyo unas letras elaboradas bastante más elaboradas que la mayoría de bandas dentro del metal extremo.
Suena a locos, pero esa dualidad es lo que hace que este trabajo no merezca un suspenso, goza de una calidad endiablada se le mire por donde se le mire, la producción es brillante, los músicos unos maestros, la propia voz de Eric suena con más rabía que nunca, pero…pero raro será que alguno de los nueve temas (el último, «Coronach» es instrumental) que conforman este disco pasen a ser clásicos del death metal algún día.
La cosa comienza bien, «Hell envenom» es todo un temazo, poderoso, arrollador, una autentica patada en la cara, salvaría también sobre todo «Para bellum», con sus ligeras orquestaciones es una autentica maravilla, las guitarras de «Bringer of storms» rayan la perfección y harán las delicias de los fans del señor Rutan, mientras que «Thus salvation» pese a su brutalidad tiene algo que lo hace diferente de los demás temas, muy del estilo de «Fury within». ¿Eso quiere decir que el resto son malos?, No, pero si que se hacen muy muy difíciles de escuchar, como sucede con el conjunto entero, demasiado afán por tocar rápido, por sonar brutales, por rizar el rizo, por que ser ‘más’ en todo…
Sinceramente, no se si decir que se trata de un buen o mal trabajo, me decanto más por lo primero, pero que no es fácil de escuchar, lo digo y lo diré hasta el día de mi muerte, quizá de cara a futuras entregas el bueno de Erik podría añadir un poquito de melodía a sus composiciones, algo que diferencia un tema de otro, sus fans se lo agradeceremos. Si no recuerdo mal el día de mi cumpleaños se pasan por aquí a tocar un poquito. Allí estaré como un clavo.
Angel Ruiz
Tracklist:
- Hell Envenom
- Whom Gods May Destroy
- Para Bellum
- Bringer of Storms
- The Funerary March
- Thus Salvation
- Proclamation of the Damned
- Fury Within
- Tombeau (Le Tombeau De La Fureur et Des Flames)
- Coronach