DIVINITY es una banda canadiense que a buen seguro tendrá éxito. Su sonido es una mezcla de Death melódico, aderezado con toques Thrash y un compendio de riffs solventes que harán las delicias de la chavalería que está creciendo bajo la tutela del denominado Metal Core, pero no nos engañemos, estos mendas van mucho más allá, y les sobra calidad para ello.
Y es que si para un álbum debut, ya te produce Tue Madsen, es que la cosa va en serio. Y para que vaya en serio, y la cosa recupere la inversión, han sabido convenientemente rodearse de un vocalista capaz de albergar dentro de si gran variedad de registros; y es que Sea Jenkins es capaz de combinar las voces brutales, los gruñidos propios del Thrash y las voces melódicas, y todo ello con una solvencia sorprendente.
Pero no nos engañemos, no estamos ante una banda de chavales con piercings recién estrenados en sus pezones dando botes inconexos. DIVINITY tienen las cosas claras, (diez años desde su creación hasta grabar “Allegory” avalan cierta experiencia y veterania), y así su punto de agresión es de la vieja escuela, así como sus breves solos beben del Heavy Metal americano más poderoso, así como sus cambios de ritmo a tesituras más melódicas no son una muestra de debilidad condescendiente con orejas sensibles.
Y ya en “Induce”, con conatos de blast-beat dan muestras de por donde van los tiros. Un tema difícilmente comprensible para no iniciados, un ir y venir constante que altera hasta al más pintado, y cierto toque de progresivismo bien entendido en la parte instrumental son la descripción de su sonido. La voz de Tue en su vertiente más apocalíptica tiene dosis del añorado “Evil” Chuck, y es que algunos riffs pueden llegar a recordar a DEATH, poca cosa señores/as.
Incluso se atreven con ciertos toques tímidos de Brutal, como en el inicio de “Power Control”, un ejemplo claro de lo que es sorprender, y es que los elementos más melódicos con los más brutales, están encajados con maestría, y como ya se ha comentado, sin forzar, y sin repetir.
Thrash, Death, Brutal, Heavy… llámalo Metal. Pero lo interesante no es que controlen tal cantidad de estilos, lo realmente alucinante es que los encajen y que en tres segundos puedan dar la vuelta a una tortilla que acaba completamente mareada. Otro punto a favor es la técnica en las guitarras, algunos punteos como el de “Methodic” o el de “Modern Prophecy” son sorprendentes.
“Strain” se mueve entre los parámetros de lo que podríamos denominar Old School. “The Unending” tiene un riff con clara influencia a los Dioses DEATH, y unas melodías vocales que sin duda recordaran a sus compatriotas INTO ETERNITY; este corte es una buena muestra de la impoluta producción de la que hacen gala, que engrandece su propuesta, y es que un buen sonido no debe estar jamás reñido con la brutalidad, más bien al contrario.
Aunando cierta complejidad de los emergentes compatriotas INTO ETERNITY, o mirando de reojo los devaneos modernos de SOILWORK, o utilizando la rabia innata de las viejas glorias del Thrash, han creado un álbum que no deja indiferente, y que a buen seguro sorprenderá. Mi cada vez más escondida intolerancia musical, ha quedado destrozada tras tres escuchas a un álbum que me pareció caótico al principio, interesante después, y fascinante en mi sentencia final. No os confundáis, pese a la variedad de estilos, esto no es un subproducto, esto es Metal en esencia.
Àlex Sánchez Cerro
Alex_sanchez@rafabasa.com
Tracklist:
- Induce
- Power Control
- Plasma
- Methodic
- Modern Prophecy
- Strain
- The Unending
- Chasm
- The Diarist
- Neuro Tyrant