Un vídeo reportaje de 4 minutos aproximadamente sobre el Ozzfest realizado por el programa de Altitude TV «Metalogy 101» ha sido colgado en YouTube. En el reportaje aparecen breves declaraciones del bajista de OZZY OSBOURNE Rob «Blasko» Nicholson, IN THIS MOMENT, HATEBREED, DAATH, ANKLA y THE SHOWDOWN entre otros. Las bandas y los fans dan su punto de vista sobre si el Ozzfest está funcionando, algo que no está muy claro.
Según el San Jose Mercury News, muchos de los fans que recogieron su entrada para el Ozzfest de este verano han preferido quedarse en casa. El citado periódico dice que solo un 50% de la gente con entrada ha asistido al evento. El pasado jueves 19 de julio se esperaban unas 18,000 personas en el Shoreline Amphitheatre de Mountain View, California, pero las fuerzas de seguridad de la ciudad montaron un dispositivo esperando a las 30,000 que tenían una entrada para el recinto.
Entre los asistentes entrevistados, varios prefieren pagar y ver a grandes bandas, que ir gratis y dar una oportunidad a grupos más underground. Los músicos en general se muestran contentos, pero parece ser que el público creó demasiada expectación recogiendo las entradas, expectación que no se ha visto reflejada en el itinerario del festival.
Solo queda comentar lo desagradecido que puede llegar a ser el público del Heavy Metal, y el desinterés que muestran las nuevas generaciones, pareciendo solo interesadas en escuchar lo de siempre. También es posible que el cartel del Ozzfest repleto de Metal Core, Nu Metal y bandas alternativas (salvo excepciones como el propio Osbourne, BLACK LABEL SOCIETY o SLAYER en otras ediciones), haya dejado de llamar la atención, siendo solo atractivo para el público los nombres grandes. Hay que dejar claro que aunque este año hay más diversidad con bandas de Black y Death Metal como NILE y BEHEMOTH, los roqueros LORDI o grupos de Heavy Metal como 3 INCHES OF BLOOD, no parece haber sido del agrado del público americano, que en años anteriores asistió masivamente para presenciar las actuaciones de bandas como SLIPKNOT, MARYLIN MANSON, TOOL, FEAR FACTORY o SOULFLY.
Me remito a la primera opción, está claro que al público no le interesan las bandas nuevas de ningún estilo, simplemente quiere ir de fiesta y escuchar lo de siempre, ya sea en conciertos o en bares. Ahora yo me preguntó, ¿qué pasará cuando desaparezcan las bandas grandes y clásicas? Desde luego que si todo sigue así, podemos olvidarnos de ver conciertos de más de 300 personas en un no demasiado largo periodo de tiempo. Hay que tener claro que las bandas clásicas provenientes de los 70 o de los 80 están alrededor de los 30 años de existencia, por lo cual, lo que estamos presenciando es en muchos casos, los últimos estertores de una ya muy dilatada carrera. Los pocos grupos que nacieron en los 90 y que siguen hoy en día activos tienen poca regularidad, las giras fuera de sus respectivos países de origen brillan por su ausencia, sacan discos cada cinco años (algo tristemente común hoy día en bandas con cierto estatus), y su repercusión no es la de hace unos años; sirva como ejemplo la gira conjunta que realizarán este verano SLAYER y MARYLIN MANSON, un claro intento de reactivar la carreras de ambas bandas mezclando los públicos a ver si se puede rascar algo.
Otro factor reseñable, es la poca longevidad de las bandas que nacen en la actualidad. En los últimos diez años, la mayoría de las bandas que han aparecido solo han dejado un escaso legado de cuatro o cinco discos de estudio en una carrera de diez años altamente irregular. Estos diez años hay que desglosarlos, ya que dicho así parece algo normal y corriente. Los primeros tres o cuatro dedicados a ensayar, tocar donde pueden y grabar maquetas, los siguientes dos editan su primer disco que sale al mercado como otro cualquiera, luego consiguen cierta relevancia en algunos casos o explosionar totalmente en otros, y concluyen cayendo lentamente hacia su declive final olvidados por un público que, solo se preocupa por el grupo de moda mientras lo está, para luego volver irremisiblemente a los clásicos de siempre.
Todo esto ha imposibilitado que nazcan bandas realmente grandes como las conocíamos en los 80 o en los 70, siendo el último ejemplo de notable triunfo masivo en todo el mundo el de MARYLIN MANSON, quien aunque hoy en día está en horas bajas, consiguió en su momento la aprobación unánime del público. Prácticamente, el resto de las bandas nacidas en los últimos 10 – 12 años no tocan nunca delante de más de 3.000 personas (en el mejor de los casos) cuando salen de su país.
No es la idea de este comentario criticar ningún estilo o grupo, simplemente es una mirada al actual panorama del Heavy Metal, herido no tanto por las descargas como por la falta de un público ávido por escuchar bandas nuevas y con ganas de apoyar una música que, de seguir así, desaparecerá como estilo, quedando solo algunos escasos grupos relativamente conocidos, y un espero que enorme y selecto circuito underground.
Antonio Cerezuela
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