LIONS SHARE, liderados desde siempre por el guitarrista Lars Chriss, vuelven a la acción, tras seis años parados, con un disco bastante más heavy, agresivo y sobre todo oscuro y pesado (muy influenciado por los riffs y ambientes SABBATH, vaya) que el metal más melódico al que nos tenían acostumbrados hasta “Entrance” de 2001… y además lo hacen con nuevo vocalista, que no es ni más ni menos que el gran Nils Patrick Johansson de ASTRAL DOORS (que parece que últimamente le ha pillado el gusto al pluriempleo, tras su participación con WUTHERING HEIGHTS, ahora con LIONS SHARE, además de su propia banda), aunque quizás aquí su voz no destaca ni brilla tanto como en sus otras dos bandas y es una pena porque para mí está sin duda entre los 3 o 4 mejores vocalistas actuales.
Además de ese punto, aunque matizado y modernizado, entre SABBATH (incluso en la portada, oscura y con monstruo a lo “Fauno” que, cuanto menos, llama la atención) y DIO (más por la voz de Nils que por la música, las cosas como son) que digo, también es óbice comentar el inevitable toque actual que me hace torcer un tanto el gesto porque de unas composiciones interesantes, buenos temas y una voz suprema, a veces todo queda algo empañado por una guitarra muy pesada, excesivamente actual por momentos, y unos riffs machacones del tipo a los que el rubio Zakk Wylde nos tiene acostumbrados en los últimos años tanto en BLS como en los últimos y polémicos (por no decir flojísimos) discos del “madman” (aunque tampoco es la tónica exclusiva de las guitarras del disco, no confundamos). Otro detalle que no me convence del todo tampoco es la producción, potente pero algo sucia, con la guitarra rítmica protagonista y la voz algo más baja que el resto de instrumentos, en esa dinámica de algunas producciones internacionales actuales que no me gusta demasiado porque se le quita importancia a las voces y a los toques más melódicos y agudos para ceder protagonismo a los graves, con lo que la música se hace más potente, rítmica y “bruta” pero se pierde matices y melodía.
Pero bueno, “protestas” aparte, un gran disco de heavy metal de retorno de esta buena banda sueca, que tiene un punto muy interesante y es el de mezclar en muchos temas las guitarras pesadas que comento y esos riffs SABBATH en primer plano con melodías y sólos intensos e incluso momentos más relajados, dándole a las canciones un punto variado muy interesante… Y es que quizás es el típico trabajo que no entra a la primera pero poco a poco te va atrapando, te cogen esos riffs profundos y potentes, la melodía empieza a sacar la cabeza desde el fondo, la voz de Nils toma el protagonismo que quizás la producción tapa (a mi parecer erróneamente), los ambientes oscuros y enigmáticos (incluso casi “doom” en algún momento) te transportan a otra época, te olvidas del punto más actualizado de ciertas guitarras y entras en ese “coma emocional” del que acertadamente habla el título… Eso sí, creo que le falta “algo”, no sé qué es pero la pitón no termina de dar esa última vuelta de rosca a tu cuello para que ya no haya vuelta atrás y te enamores de este disco. La base y la estructura es perfecta pero le falta el último empujón para pasar de gran disco a “clasicazo” (precisamente lo que sí tiene ASTRAL DOORS y quizás ahí se me presenta a mí la diferencia entre ambas bandas, aún teniendo mucha relación sónica en este disco, tirando más los primeros a RAINBOW y DIO, y LIONS SHARE hacia SABBATH en general).
El disco se compone de 10 temas, más una intensa versión bastante ambiental para cerrar de “Sorcerers”, de los míticos ANGEL WITCH (otra de las bandas que creo que también tiene mucha importancia en que “Emotional coma” haya sido parido, al igual que unos primeros CANDLEMASS, o incluso riffs o melodías extraídas de muchos años escuchando la música, que no la voz, de MERCYFUL FATE). Quizás hay dos o tres temas más netamente pesados y actuales que me han entrado peor como la inicial “Cult of dental” (y eso que comienza con un delicioso comienzo acústico y es pegadiza pero me ha gustado menos que otras del disco), una más monótona “Traflicking” (aunque más melódica y atractiva en el estribillo), o “The edge of the razor” (eso sí, con sólo final muy guapo de Bruce Kulick, ex KISS, como invitado especial en el tema); pero después hay auténticos temazos en el disco, muy variados y “musicales” como la propia “Emotional coma” (que empieza más moderna pero que a mitad del tema torna a un temazo más melódico en la onda de los mejores momentos de los BLACK SABBATH con Tony Martin, y además colabora Glen Drover de MEGADETH a la guitarra), un tema 100% SABBATH de la etapa OZZY (o si acaso con reminiscencias de la etapa de “Mob rules” por aquello del toque DIO de la voz de Nils, jeje), pesado y oscuro como es “Bloodstained soil”, la cañerísima “Clones of fate” (mucho más heavy y potente, con guitarras de lujo en este caso y un Nils de 10, temazo de lo mejor del disco sin duda), otro tema potente como “Toxication rave” (cañera, casi “thrash” y con cierto aire a MEGADETH en las guitarras) o “Soultaker” (también más heavy, con reminiscencias de DIO, aunque con guitarras más actuales por momentos, y que recuerda bastante a los propios ASTRAL DOORS).
En definitiva, un disco muy interesante pero que cuesta cogerle el punto inicialmente, ya sea por el punto más actual de las guitarras rítmicas o porque tiene a veces unos desarrollos instrumentales bastante pesados y “pastosos”, que casi se pueden masticar, pero que, una vez que te entra, te descoloca sin duda para bien. Oscuro, rudo, enigmático, potente y con esa mezcla de heavy clásico y punto actual que pocas bandas combinan adecuadamente… Eso sí, al igual que me pasaba con el último y espléndido trabajo de WUTHERING HEIGHTS, me parece que la voz de Nils Patrick Johansson, por ser tan particular, potente y atractiva, se come mucho protagonismo y lleva a cada disco en el que participa a su particular terreno (no lo digo como algo negativo necesariamente, y es que de hecho me alucina su voz, pero sí es un detalle que está ahí y es cada uno el que lo tiene que ver como algo bueno o malo)… Un disco distinto (que hace el quinta de la discografía de los suecos, por cierto), que requiere ser escuchado con atención, pero muy interesante al fin y al cabo.
David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)
Track list de “Emotional Coma”
- Cult Of Denial
- The Arsonist
- Emotional Coma (feat. Glen Drover)
- Clones of Fate
- The Edge of the Razor (feat. Bruce Kulick)
- Toxication Rave
- Trafficking
- Bloodstained Soil
- Soultaker
- Hatred’s My Fuel
- Sorcerers (ANGEL WITCH cover)
- Ring of Stupidity (bonus track for Japan and digipak)