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KISS FOREVER + KILLING MACHINE – Barcelona

23 mayo, 2007, 7:05 pm

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KISS FOREVER BAND

+ Killing Machine

Sábado 12 de Mayo de 2007 – Sala Apolo – Barcelona

Si hay una banda dentro del rock y el metal que genera pasiones y un seguimiento casi extraordinario por parte de sus fans, esa es KISS. Convenciones, imitadores, coleccionismo de todo tipo de cosas y un montón de bandas actuales que han sido influenciadas (musical y estéticamente) por la que sigue siendo para muchos “the hottest band in the world”. La ocasión era un buen motivo para reunir a los seguidores de una de las bandas que cuenta con más clubs de fans en todo el mundo. No obstante, la respuesta del público fue algo modesta. Evidentemente, estábamos delante de una banda tributo, pero los que asistimos al concierto de KISS FOREVER BAND pudimos disfrutar y sobre todo, divertirnos con una banda muy entregada en el escenario y con una puesta en escena muy lograda.

El concierto comenzó con la actuación de KILLING MACHINE, banda barcelonesa tributo a otra de las formaciones fetiche del metal, JUDAS PRIEST. Entre sus miembros, es agradable reencontrarse con gente tan cercana en la escena de la ciudad como Marc “Disident Agressor” Pagés (¿quien no recuerda a los míticos Legion?) a la guitarra, el periodista musical Yuri “Sentinel” Vargas al bajo, o el polifacético Jordi Ricol, aka “Turbo Lover”, en su vertiente más metálica como ya consagrado imitador de Rob Halford (incluso en el aspecto físico).

Completaban la banda los apodados “Tyrant”, como guitarra solista, y “Running Wild” a la batería. Como discípulos y a la vez profetas del metal más clásico para las nuevas generaciones, los KILLING MACHINE ofrecieron un repertorio donde no faltaron los temas más emblemáticos de JUDAS, especialmente de sus discos más legendarios como “British Steel” o “Screaming For Vengeance”. Canciones como “Electric Eye”, “Metal Gods”, “Victim Of Changes”, “You’ve Got Another Thing Comin’”, y el broche de oro final con “Breaking The Law” y “Living After Midnight”, que fueron coreadas por gran parte del público. Mucha diversión y buen rollo para rememorar a uno de los grandes que, curiosamente, no cuenta con conocidas formaciones tributo. Ventaja también en este aspecto para estos KILLING MACHINE.

Con una trayectoria de 12 años, KISS FOREVER BAND no es una simple banda tributo al uso. En su historial, cuentan con la participación en numerosas convenciones oficiales de KISS y son reconocidos como una de las formaciones que mejor reflejan el espíritu de la banda sobre los escenarios, tanto musical como visualmente. Procedentes de nada más y nada menos que Hungría, la KISS FOREVER BAND está formada por Zoltán Váry (Paul Stanley), Pocky The Demon (Gene Simmons), Zoltán Maróthy (Ace Frehley) y Tabola Csaba (Peter Criss). Como no podía ser de otra manera, los cuatro, maquillados y vestidos a la perfección, tocaron los temas más esperados de KISS y las referencias directas a sus ídolos fueron evidentes durante todo el show.

La actuación comenzó con “Deuce”, seguida de “Strutter” y “Cold Gin”, con lo que se metieron rápido al público en el bolsillo, sabiendo bien que era lo que de ellos se esperaba. Tras una efectiva “Do You Love Me”, dedicaron a los fans de KISS (es decir, a todos los que estaban presentes) “Hooligan”, finalizando con Gene (n.d.r. utilizaremos los nombres de los miembros de la banda imitada para identificar los músicos) escupiendo fuego. Prometiendo dar el cien por ciento en el escenario, siguieron con “War Machine”, el último tema de “Creature Of The Night”, para muchos el álbum más salvaje de KISS.

A “Shock Me” le siguió el solo de guitarra de Ace. Para el siguiente tema, Paul animó al público a cantar desde el primer momento, coreando el estribillo de “I Was Made For Lovin´ You”. La canción terminó con otro de los momentos inevitables, el solo de bajo y Gene vomitando sangre ante la mirada atónita de las primeras filas. Continuando el show en un momento álgido, atacaron con la poderosa “God Of Thunder”. Tras “Tears Are Falling”, es el turno del solo de Peter a la batería, que enlaza, tras los aplausos de la audiencia, con “I Love It Loud”.

Tras “New York Groove”, “Lick It Up”, “Let Me Go Rock’n’Roll”, “Shout It Out Loud” y “Black Diamond” la banda toma un leve respiro para afrontar la parte final del concierto. Ésta se inicia con la incursión de la balada “Beth”, con lanzamiento de rosas al público, para regresar con fuerza al grito de “Do you want more?”, con “Detroit Rock City”. Como no podía ser de otra manera, la fiesta finalizó con “Rock And Roll All Night”, con banda y audiencia coreando al unísono. En definitiva, un show donde todos sabíamos lo que buscábamos y de buen modo encontramos. Tras el concierto, los músicos aceptaron amablemente hacerse fotos con todos quienes quisieran, con lo que muchos pudieron llevarse un divertido recuerdo a casa.