Dedicarse al rock progresivo es duro, muy duro: los motivos son varios, uno de ellos es porque si bien en este estilo prácticamente vale todo, también es cierto que en el momento en que un artista resulta previsible o se repite en exceso esta poco más que condenado a la indiferencia. Él otro es por el abuso que ha habido de la denominación o reclamo de “progresivo” por parte de muchas bandas que han aportado poco más que el ser meros émulos de los DREAM THATER (lo cual no es moco de pavo, lo reconozco ) o a base de ejecutar escalas arriba, escalas abajo sin sentido alguno. Por esto mismo, admiro a grupos, artistas y compositores que como Michael Akerfeldt, Tory Ostby (sensacionales discos con ARK), sus locos compatriotas ARCTURUS o sus vecinos suecos VINTERSORG, o el caso que nos ocupa estas líneas, el ínclito Neal Morse, nos cautivan con los más variopintos arreglos o los más bellos pasajes instrumentales inspirados en vaya a saber usted que.
“Sola Scriptura” es el nuevo álbum del guitarrista de los SPOCK’S BEARD Neal Morse, un disco conceptual que tiene como leit motiv la religión, en el que Neal se sirve de una historia ambientada en la Europa de las reformas de Lutero para narrarnos y musicar escenas más escabrosas y los abusos cometidos en nombre de la Iglesia. Para dicha aventura, Neal a contado con el gran baterista Mike Portnoy y al teclista Jordan Rudess (de los DREAM THEATER), Randy George (AJALON), y Roine Stolt (FLOWER KINGS, TRASATLANTIC), Steve Hackett (GENESIS), y como es de esperar de tal elenco de músicos el resultado es sensacional en lo que se refiere a interpretación.
Desde el punto de vista Compositivo, es un disco más barroco y complejo que el anterior “One” mucho más directo en su propuesta musical. En “Sola Scriptura” hay cabida a todo tipo de guiños a diversos estilos musicales que fluyen con completa naturalidad, desde el Hard Rock, el Rock clásico o la Música Clásica, hasta sorpresivas partes de Rock-Pop Latino o Rock Sinfónico.
El disco comienza con “The Door”, una pieza de más de veintinueve minutos cuyo inicio “introduction” es un intrincado pasaje instrumental de más de cinco minutos, de corte hardrockero, adornado arreglos de teclados unas ambientales y otras influencias más estilo fusión . A esta le sigue la épica “In the Name Of God”, un corte ejecutado a medio tiempo en el que destacan un riff de guitarra muy técnico y unas partes de piano enfocados al Rock clásico e interpretación vocal de cariz teatral a lo QUEEN, sobretodo por los efectos empleados en los estribillos. “In The Name Of God”desemboca en el Rock melódico de “All I Ask For”, en donde las melodías elegantes y suaves son las claras protagonistas. “Mercy for sale” nos devuelve a un Hard Rock en el que predominan unas guitarras más crudas con efecto wha, seguido de unas partes vocales más melódicas de reminiscencias Beatlianas. “Keep Silent” es un corte de Rock progresivo dinámico en el que se intercalan partes de diversa intensidad, recreando distintos ambientes, coros de corte Rock americano en el que es destacar la maestría de los músicos de este trabajo en la ejecución de este tema. Espectacular el trabajo de guitarras. “Upon The Door” concluye este primer “capitulo”en el que ponen como colofón tenemos un solo de los que quitan el hipo.
La historia continua con “The Conflict” otro tema de gran duración que comienza con potente “Do You Know My Name”, la pieza más netamente Heavy del disco en lo que a estructura e intensidad se refiere, de hecho las guitarras me han recordado en cierto modo por el estilo a Zakk Wylde. “Party To The Lie” es bastante menos agresivo en cuanto el sonido pero igual de enérgico. Un corte que fusiona perfectamente Rock y Pop dando como resultado un tema ameno y fresco que precede a “Underground”, el cual comienza con melodías que proceden de la introducción de “The Door”, para mantener un hilo conductor a la obra, y se torna más ambiental y tranquilo con un final guitarras acusticas precioso que se enlaza con “Two Down One To Go”, en el que Neal Morse y compañía vuelven a dar la vuelta a la tortilla pariendo una pieza cálida de cariz latino. “The Vinyard” es una vuelta al Hard Rock progresivo de “In The Name Of God” al cual le hacen un guiño en la melodía poniendo fin a esta segunda pista de forma tranquila y sensual “Already Home”, más enfocado al público degustador de AOR.
El tercer corte del disco es “Heaven In My Heart”, el tema más accesible en lo que se refiere a duración y el único que me imagino que sería radiable en lo que a duración se refiere. Se trata de una composición realmente inspirada, que se inicia con una melancólica y dulce melodía de piano sobre la que Neal Morse se luce en su faceta de vocalista haciendo una gran interpretación y que se endurece progresivamente convirtiéndose en un bonito tema de Rock elegante con arreglos de teclados, orquestales y coros en los que se aprecia cierta influencia de la música Negra.
El último corte recibe el lógico título de “The Conclusión”, en el que se conduce en seis actos a la historia a su desenlace. El epilogo de esta obra se inicia con una introducción de melodías y punteos hipnóticos que dan cierta sensación de vértigo, como si de una caída al vacío se tratase, con “Randy’s Jam”, pieza que da paso a la teatralidad de “Long Night Journeys”, un tema en que los arreglos de cuerdas dan a la composición cierto exotismo. “Re-introduction” toma la melodía principal de la obra para servir de base a un nuevo desarrollo instrumental que enlaza con “Come Out Of Her” en el que resaltan por encima de todo unos arreglos de cuerda similares a los de “Long Night Journeys”. “Clothed in The Sun” mantiene el tono épico del tema, terminando el disco con “In Closing”.
Posiblemente no sea un disco de lo más trasgresor en lo que se refiere a planteamientos musicales pero lo sensacional de la ejecución, la impresionante producción y la belleza elegancia y riqueza de los arreglos hacen de este disco una excelente obra que merece un hueco en cualquier discoteca.
Rafa Torrent
Track list:
- The Door
- The Conflict
- Heaven In My Heart
- The Conclusion