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+MAD MAX
Viernes 2 de Febrero de 2007 – Sala Heineken – Madrid
Desde hace muchos años soy un gran fan de AXEL RUDI PELL (el grupo) y por avatares del destino, entre unas cosas y otras nunca había podido ver previamente al rubio admirador de Ritchie Blackmore y sus secuaces con lo que estaba realmente emocionado antes del concierto.
Antes de meterme en la crónica, tengo que decir que el concierto en sí empezó prontísimo (a eso de las 19:45) con lo que me fue imposible llegar a ver a MAD MAX, una banda de mediados de los 80 (aunque ahora han vuelto a la acción de la mano de un buen “Night of white rock”) de ese hard/heavy tan típicamente alemán y que siempre me ha gustado con su estilo sencillo pero efectivo. Una pena que realmente me fastidió pero es que sigo pensando que no son horas de empezar los conciertos en días laborables, porque no fui precisamente el único que me los perdí. Valga decir que tocaron unos 40 minutos y, según me comentaron, con buen sonido y presentándose en bastante buena forma y tocando con muchas ganas pese a la “cristianización” que han sufrido de cara a esta nueva etapa de la banda.
Destacar a un Michael Voss en un buen estado vocal (aunque también tocó la guitarra rítmica) y al guitarrista Jürgen Bretford tocando con una preciosa guitarra de flecha modelo Dimebag Darrel. Viendo el set, me gusta comprobar que no se ciñeron a su última época, de la que tocaron pocos temas como “Hope to see you again” y nos dejaron alguna pildorita clásica como “Never say never”, “Night of passion” o la genial versión del “Fox on the run” de los SWEET que popularizaron en el 86. Buen concierto pero ya digo que me baso en comentarios ajenos ya que yo no llegué al recinto hasta las 20:30, justo cuando acababan de terminar MAD MAX… ¡grr, que rabia!
Quiero destacar, eso sí, que, una vez que terminó el concierto, bajaron a las primeras filas a saludar a los fans y hacerse fotos y firmaron durante un buen rato sin parar de sonreír, en un detalle que me gustó mucho por parte de la banda.
Bueno, y centrándonos en AXEL RUDI PELL, decir que venían presentando un interesante “Mystica”, último trabajo de la formación, y que yo no era el único con ansia de ver a la banda pues la sala Heineken estaba hasta arriba, hasta resultar incluso incómodo por momentos (para cuando una sala de tamaño medio decente en Madrid para ver este tipo de conciertos…). Es estúpido predicar en el desierto así que vamos con lo vimos:
La formación que acompaña al guitarrista alemán desde hace años es un auténtico lujo y, de hecho, creo no exagerar si digo que la mayoría de la gente durante el concierto prestaba más atención al loco “mohicano” Terrana, impresionante una vez más, al simpático y juguetón (con el teclado) Ferdy Doernberg, al orondo y enorme (y muy buen bajista, por cierto) Volker Krawczak y sobre todo a un vocalista excepcional y, visto lo visto, también excelente frontman como es el americano Johnny Gioeli. Creo no exagerar si digo que es posiblemente el mejor cantante “nuevo” de la actualidad junto al gran Lande y si acaso, precisamente su sustituto en MASTERPLAN, Mike Dimeo. Una pena que en una banda como AXEL RUDI PELL esté algo desaprovechado en directo (me recordaba en ocasiones al caso de Dougie White con YNGWIE) porque las posibilidades son infinitas y entre sólos y temas más largos se pierde la ocasión de ver a un monstruo como Gioeli que en acción es imparable.
Aparte de esto, el concierto me pareció excelente con las matizaciones que ahora comento: Ya os digo, la banda es excelente y en el concierto estuvieron a un nivel supremo, de lo mejorcito que he visto en directo en mucho tiempo, el sonido fue extrañamente de 10 (y digo “extrañamente” porque en la Heineken no suele haber mal sonido… pero ya está), el público acudió en masa y además se mostró muy animado desde el principio y el nivel musical fue altísimo durante todo el show. El problema fue precisamente que al final pudimos ver un concierto típico de AXEL RUDI PELL, incidiendo demasiado en la última época (además con muchos temas del último disco, algo que me parece loable pese a todo) pero sobre tocando demasiados temas extensos y lentos, con profusión de sólos (hubo de guitarra, teclado y batería) y haciendo que el concierto entrara sin remedio en continuos altibajos, con lo que al final era imposible que la gente se terminara de animar y que el concierto arrancara de verdad… Fue una pena porque ya digo que objetiva y musicalmente el concierto fue de 10 pero creo que todos nos quedamos con un ligero regusto de lo que puede ser AXEL RUDI PELL en directo y lamentablemente siempre se queda un paso atrás por eso.
Bueno, tras una espera más larga de lo esperado el concierto empezó muy potente con tres temas de sus últimos discos, “Fly to the moon” (que abre “Mystica”), “Strong as a rock” (de “King and queens”) y “Follow the sign” (de “The shadow zone”), y realmente fue un inicio arrollador, un cañonazo que nos dejó a todos con la boca abierta. Ya digo que especialmente no podía dejar de mirar a un energético Johnny Gioeli que clavó cada nota, cada grito, cada melodía vocal y todo ello sin parar de moverse, de animar, sonreír y bromear tanto con la banda como con nosotros, un frontman de los de antes, todo un lujo. Ya entonces nos dimos cuenta de que el sonido iba a ser excelente y de que, para los que éramos primerizos, como yo, viendo a esta banda íbamos a alucinar. Por cierto, Axel estaba enfermo y por ello estuvo más absorto y parado que de costumbre pero a mí me sorprendió positivamente ya que pensaba que iba a sonar más sucio y sobre todo menos preciso en directo y me equivoqué de plano, me pareció un gran guitarrista pero mucho mejor en las canciones en sí que en los sólos o variaciones (dónde sí es excelente a todos los niveles el teclista Ferdy o el propio Terrana por ejemplo).
Tras el inicio “a saco” vino el primer parón de la noche, con el ambiente caldeado al 100% y la verdad es que me pareció muy pronto meter entonces el extenso medley con “The masquerade ball” y “Casbah” que paró demasiado el concierto que realmente había comenzado “a tope”. Impresionante interpretación pero sigo pensando que con un tema de este tipo en los conciertos de Axel sería suficiente… pero a él le encantan y es el jefe así que “ajo y agua”… El pequeño bajón se acentúo con el sólo posterior de Mike y no porque no le guste a la gente o porque estuviera flojo, ¡nada más lejos de la realidad! El problema es que tan al principio… Eso sí, cómo siempre encandiló al respetable con su potencia y buen humor (incluso se cantó al final un trozo del “I’m too sexy” de los hermanos BROS, poperos guaperas de finales de los 80, ¡que crack!) pero es inevitable que paró el buenísimo ritmo con el que empezó el concierto.
El siguiente tema retomó el buen tono inicial. Fue una genial “Mystica”, que da nombre a su nuevo trabajo, y que realmente sonó de maravilla, muy melódica y con un Gioeli de nuevo supremo. Eso sí, sigo diciendo que en directo quedan mejor los temas directos a lo “Nasty reputation” (que no la tocaron), “Streets of fire” o “Earls in black” por ejemplo que estas canciones más largas y de desarrollo mucho más variado y extenso. Pero no protesto, es una gran canción que dio paso a otro momento curioso (pero de nuevo demasiado pronto) como fue un breve show acústico (con sus taburetes y todo y Mike Terrana tocando los bongos en el suelo como un indio mohicano de verdad -alguna coñita le hizo su buen amigo Gioeli al respecto, jaja-). Fue curioso escuchar a la banda interpretar un “Love gun” de KISS en acústico (¡esto si que no me lo esperaba!), que sonó de maravilla aunque, una vez más, la mitad de la sala miraba como diciendo “¿y este tema de quien es?”, en fin, nada nuevo así que ya no me cabreo sino que sólo lo comento como anécdota… El siguiente corte lo presentó Jonnhy como “una de sus canciones favoritas” y no fue otra que una alargada versión de la preciosa balada “Oceans of time” que daba nombre a su joya del 98, que quedó muy bien en directo pero que pierde mucha fuerza en formato acústico, todo sea dicho.
Ligero parón para retirar los “utensilios acústicos” para dar paso a otro extenso paraje a modo de sólo de guitarra y teclado (interpretando la instrumental “Haunted castle” de su último disco) que desembocó en un interesante sólo de teclado de un sonriente Ferdy Doernberg, primero golpeando uno de sus teclados que a su vez tenía un pie movible y elástico con lo que se balanceaba mientras lo tocaba creando un efecto visual muy curioso que el propio Ferdy aprovechaba a la perfección. Tras esto se colgó el “teclado principal” al hombro y se fue al medio del escenario para terminar mezclando su teclado con una serie de programaciones electrónicas, digamos industriales, en algo muy curioso de escuchar pero que me desencajó un poco, no os voy a engañar.
Tras el momento estelar del orondo y simpático teclista (¡es que no paró de bailar y sonreír en todo el concierto!), volvió de nuevo la banda al completo para interpretar una buena versión del clásico “Temple of the king” de RAINBOW, en este caso en eléctrico (justo lo contrario del “Oceans of time”, pero bueno, opiniones aparte, quedó de lujo… aunque muchos pensamos aquello de “será por temas de AXEL RUDI PELL para tocar dos versiones…” por mucho que nos gusten KISS y RAINBOW).
Bueno, después del parón central (es que al final el concierto se dividió como en tres partes con sus “subidones” y bajadas correspondientes), volvió digamos la parte de concierto normal, de nuevo con Johnny en plan frontman desbocado (bromeando con alguna chica de las primeras filas… bueno, y bailando como alguna del fondo mientras se reía al “imitarla”… es que encima era simpático y agradecido “el jodío”) y dándolo todo en una genial “Tear down the walls”, el temazo que abría “The masquerade ball”. “Rock the nation” es uno de los temas melódicos y accesibles, 100% AXEL RUDI PELL que hay en el nuevo disco y la verdad es que subió muchos enteros con su ritmo más heavy y pegadizo, un gran tema para el directo que me encantó.
El concierto ya iba por la hora y media y sabíamos que quedaba poco con lo que era inevitable que llegara “ya” un guiño a los inicios de la banda, en este caso con una macarra y gamberra “Call her princess”, adornada una vez más por un sólo en medio del tema y un guiño al “Burn” de DEEP PURPLE. Aún así, gran tema que el propio Johnny se encargó de dar sentido al estribillo con miradas y sonrisas a alguna de las “hottest girl in town” que había por el público (y Terrana tocando con una especie de alas plateadas en la cabeza, este tío es único, jaja… se le nota muy feliz ya fuera de RAGE, no sé, me dio esa impresión en todo momento y por eso lo comento)… Tras la pertinente falsa retirada de la banda ya sólo había tiempo para un tema más así que la escogida para cerrar el concierto fue una pegadiza y muy movida “Fool, fool” de los tiempos de Jeff Scott Soto (concretamente del “Black moon pyramid”) que nos dejó a todos con ganas de mucho más pero lamentablemente los horarios de las salas madrileñas nos fastidiaron una vez más (y me imagino que la enfermedad de Axel influyó también porque todavía no eran ni las 11) y nos quedamos sin escuchar “Carrousel” que estaba en el set prevista como fin de fiesta… ¡Ah!, y no quiero cerrar sin comentar el gran telón con el clásico logo de la banda que adornaba el escenario y las impresionantes luces que nos acompañaron a lo largo de todo el show, un lujazo de verdad, y más en una sala pequeña como es la Heineken.
Ya digo que un viejo fan de AXEL RUDI PELL como yo podría protestar por muchas cosas pero todas subjetivas. Por supuesto que a muchos nos hubiera encantado que el concierto fuera más dinámico, que hubieran tocado más temas directos y menos canciones largas y sólos, que en el set hubieran incluido más cortes de los primeros discos de la banda (recordemos que “cayó” sólo uno del primero y dos de la época Soto) y que se le diera más protagonismo (100% merecido) a un diamante en bruto como es Jonnhy Gioeli (¡que buenísimo cantante en disco y también en directo!), pero realmente aquí manda Axel y es como protestar en un concierto de Yngwie, “es lo que hay” y hay que aceptarlo. Ya digo que el concierto me pareció excelente y lo disfruté muchísimo aunque repito que me da rabia el tener que “conformarme” con esto y no con lo que podría ser (pero es que si pensamos esto de conciertos de bandas como MANOWAR, RAGE, el propio YNGWIE o el caso de MAIDEN con el último disco por ejemplo…).
Por cierto, comentar también que en cuanto acabó el concierto estuvieron Mike Terrana y Ferdy Doernberg firmando y haciéndose fotos con todo el mundo y un poco más tarde se unieron también Gioeli y Volker Krawczak, en un detalle de los músicos que me pareció excelente para con el público que había ido a verles.
Recordar que después de los conciertos españoles se ha suspendido el resto de la gira europea por la citada enfermedad de Axel. Una pena pero al menos en España hemos podido disfrutar de una banda genial que no es demasiado fácil ver en directo habitualmente. A ver si hay suerte y caen este verano en alguno de los festivales nacionales (y a ver si teniendo menos tiempo tocan más canciones y menos “pasajes musicales”, jeje). Lujo de banda, de cantante y genial concierto pese a todas las reservas comentadas. ¿Cuándo será la próxima, Axel?
Texto: David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)
Fotos: David Esquitino y Mar Tomas
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