Curioso nombre para curiosa banda. UNEARTHLY TRANCE, un grupo desconocido para unos y cada vez más famoso para el resto, nos trae nuevo disco con su orgiástica manera de ver su estilo de música. Encasillados por los media en un grupo de doom metal, en realidad su sonido no sólo es doom sino mucho más. Una mezcla de tendencias en una coctelera que dan al traste con las manidas leyes del estilo configurando una sonora delicatessen.
Este grupo, que tiene en su haber otros 2 discos además del que ahora mismo estoy escuchando, «The Trident», llegan desde Long Island y Brooklyn y llevan en este mundillo desde el año 2000. La pira funeraria metafísica que, en sus propias palabras, intentan forjar con su música, no ha hecho más que comenzar. La punta de lanza y vértice de su carrera lo forma este «The Trident», primer disco con Relapse Records.
Curtidos técnicamente y originales 100% conforman una vuelta de tuerca al género como ya demostraron en su fantástico «Season of séance, Scence of silence» y en el no menos bueno «In the red», en este disco nos ofrecen un abismo insondable donde las sensaciones parecen mezclarse entre hálitos de fuerza y apasionada reluctancia, en un disco divertido, socarrón, efusivo, visceral e incluso épico.
Es un disco que recomiendo para aquellos que gusten del doom como para aquellos simplemente que desean probar nuevos sonidos. Puesto que, aunque UNEARTHLY TRANCE, se pasean como quieren por el género no son solo éso, dotan a su estilo de una mayor agresividad con tintes stoner y voces incluso black con una base claramente hardcoriana. Una mezcolanza de sonidos que no deja impertérrito a ninguno y que desde luego llama, cuanto menos, la atención.
En esta diatriba de sonidos es de destacar su joya: «Wake Up and Smell The Corpses» claro ejemplo de lo que hablan estos neoyorkinos. Rabia, muerte, ostracismo, subconsciente, abismo insondable, locura, paranoia, alucinación, alfa y omega, principio y final, todo diluido en una secuencia de extremismo donde las sensaciones divagan entre el horror absoluto y una extraña inquietud que nos recorre todo el cuerpo. Subyace una atmósfera que nos recuerda a los primerizos BLACK SABBATH.
Destaca la implosión a las que nos somete con su primer tema, «Permanent Ice» antes de envolvernos en un hálito agresivo y apasionado, aguerrido y funesto, donde una furia agria se transforma en eterna melancolía.
Hay temas para todos los gustos, más rápidos, más lentos, mas agobiantes, más funestos, pero ninguna canción te dejará indiferente. Llenas de odio, furia, al albor de un triste devenir, fulgurantes vías de escape donde las emociones se desenvuelven en halos de eterno resquemor. Es un disco completo, de principio a fin, con canciones sencillas pero complejas en su estructura, con cambios de ritmo y contrapuntos constantes, donde la voz descarnada de Ryan se torna en escalofriante, en andanadas nihilistas y agoreras.
En cuanto a la producción, sencillamente, no está mal. No es ni mucho menos brillante pero es correcta, no «maltrata» a ningún instrumento y deja un digno sabor de boca. Una producción sin florituras, ni efectos recargados, que nos proporciona justo lo que queremos y es escuchar lo que el trío quiso hacer y cómo lo quiso hacer, ni más ni menos.
Por último resaltar que éste es un disco en un estilo peculiar. Será doom, será experimental pero un disco que desde luego es rico en matices y fácil de escuchar. Un disco que recuerda a NEUROSIS, BLACK SABBATH, incluso THE OCEAN, virtuoso en su sencillez excelso en su complejidad y desde luego, un buen disco. Lleno de buenas ideas, sincero, y sobre todo repleto de una gran variedad. En el que viajamos desde los abismos de «The Air Exits, The Sea Accepts Me», hasta la eterna oscuridad de «Scarlet». En definitiva, ¿a qué estas esperando para catarlo?
Almudena Núñez Husillos
Lista de temas
- Permanent Ice
- Decrepitude
- You Get What You Want
- The Air Exits, The Sea Accepts Me
- Scarlet.
- Wake Up and Smell The Corpses
- Firebrand
- In Self, Infinite
- Where The Unbelievable Is Ordinary