THREAT SIGNAL – Under reprisal

Raro es que un disco del cualquier grupo que practique metal industrial llame mi atención, mucho menos si se trata de un disco de debut, pero puedo asegurar que si en posteriores entregas van a sonar igual que en este «Under reprisal», por Tutatis que me convierto en su fan número uno y les hago reverencias si fuera necesario. Lo cierto es que catalogar sencillamente a estos jóvenes canadienses como metal industrial se queda un poco corto, y es que no por ello reniegan de retazos death/thrash metaleros ni de (aunque parezca extraño) solos de guitarras netamente heavys.

El disco comienza sin miramiento alguno con «Racional eyes», una autentica patada en los dientes, guitarras ultra agresivas a cargo de Kyle McKnight y Rich Howard, una base rítmica demoledora y un cantante, Jon Howard, que hace lo que quiere con sus cuerdas vocales, tornándola lo mismo gutural, que rota hasta el dolor y melosa cual baladista profesional. Para mear y no echar ni gota, que se suele decir vulgarmente. «As I destruct» dará continuidad a nuestro ejercicio cervical a base de unas guitarras enfermizas y los espeluznantes alaridos de Jon, todo ello mezclado con pasajes melódicos al más puro estilo de los FEAR FACTORY más en forma, solo de guitarra incluido.

«One last breath» es tan sencilla como brutal, genial, con unas guitarras brillantes que dejan entrever claramente que las fuentes de las que beben estos tíos son muchas y variadas, algo que se nota sobre todo en algo tan impropio de estos estilos como son los solos. «Seeing red» no da tregua, caña, caña y más caña con las habituales partes más lentas y voz clara, pero predominando siempre las melodías más bestias, y es que lo de este chico no tiene nombre, eso es cantar y lo demás es cuento, si en directo es capaz de hacerlo así ole por él!. Con «A new beginning» bajan un tanto el pistón, aunque vuelven a ensañarse con nuestros tímpanos a base de batería contundente en «Counter balance», por otro lado un corte un tanto diferente a los anteriores puesto que la voz de Jon no llega a sonar en su plenitud de rabia, siendo bastante melódico en general.

«Inane» es un corte machacón, duro y de pesados riffs, muy en la línea de la banda de Burton C. Bell en el pasado, mientras que «Now» comienza como una huracán que se lleva por delante todo lo que le sale al paso, la batería de George Parfitt vuela en un inicio para amoldarse posteriormente al resto de la banda en un tema muy variado y oscuro, comenzando «Faceless» como conteniendo la respiración, esperanzo agazapada para saltarnos a la yugular esgrimiendo guitarras asesinas y desdobladas. De auténticos maestros.

«Haunting» probamente sea el corte más lento del disco, bastante meloso y extrañamente emotivo si tenemos en cuenta la cera que han repartido durante nueve temas, aunque curiosamente, no desentona en absoluto, y eso que «When all is said and done», tema que cierra el disco, es una pieza agresiva en la que se han atrevido incluso con guitarras acústicas y unos sintetizadores/teclados con bastante más protagonismo que a los largo del todo el disco, muy en la línea de unos primerizos ILL NIÑO. Sin lugar a dudas estamos ante uno de los mejores debuts de este año que ya llega a su ecuador, si te consideras abierto de mente metaleramente hablando, este disco te encantara, y si es que no, regálate unos minutos y te sorprenderá.

Ángel Ruiz

Track List: