Ultimo trabajo de la banda paralela de Janne Warman, teclista de CHILDREN OF BODOM que baja algunos enteros respecto a sus discos anteriores, aunque vuelve a ofrecer un correcto trabajo de metal melódico, cercano al Power en muchos de sus cortes, más próximo al Progresivo en otros y contando con la colaboración de músicos muy conocidos como Timo Kotipelto de STRATOVARIUS y otros algo menos como Marko Vaara (TUNNELVISION) o Jona Kosonen (NYLON BEAT). Metal Neoclásico, como les celebran las críticas, aunque ya tenemos bastantes etiquetas como para tratar de meterles en esta también.
El conjunto es un disco que resulta agradable de escuchar y que ofrece una muestra muy diferente del estilo al que Warman nos tiene acostumbrados en COB. No obstante, su calidad como teclista se observa desde el comienzo, con un «Accept the fact.» Instrumental rapidísimo que abre el disco con un gran ritmo y que ofrece esos toques «prog» que tanto se mezclan con el power en los últimos tiempos, y que enlaza perfectamente con «Invisible Power» un tema en el que la inconfundible voz de Kotipelto no nos permite olvidar a su propia banda, aunque en este caso acompañada de una forma algo más melódica. Kotipelto canta alto, tal vez demasiado, pero es una canción que llega bastante al corazón, especialmente si se ha sido seguidor de los primeros discos de la banda del pequeño cantante.
«Water of Lethe» está cantada por Marko Vaara y continúa en la línea del heavy finlandés, con toques power y melódicos. Buenos coros y alegría al mismo tiempo que suavidad melódica conforman uno de los temas más logrados de todo el disco. De nuevo el teclado de Janne Warman está presente a lo largo de todo el tema, aunque sin desmerecer al guitarrista Antti Warman, perfectamente acompasados de nuevo en la instrumental con dejes progresivos «Roppongi Rumble». Rápida al mismo que técnica y pegadiza. Perfecto ejercicio de juego musical con una simple melodía a la que se van incorporando partes cada vez más complejas.
Si sin llegar a conocer la doble faceta de Warman escuchamos «They all blame me» nunca imaginaríamos que su compositor toca el teclado en Children of Bodom. Es un tema más cercano a las melodías de rock americano, suave y acompañado por la dulce voz de Jona Kosonen y si bien la canción no resulta desagradable después de varias escuchas, no cabe más que preguntarse por qué la han incluido en este disco ya que no acaba de encajar.
Con «Puppet» vuelve a aparecer la voz de Timo Kotipelto lo que supone una garantía de éxito vocal, ya que salvando esos tonos tremendamente agudos a los que a veces parece subir de forma forzada, no cabe duda de su gran calidad vocal. Un tema de nuevo cercano o que puede recordar a sus últimos trabajos en STRATOVARIUS pero que logra subir bastantes enteros frente a la canción anterior.
«Lying Delilah» nos vuelve a traer a un Marko Vaara esta vez más agresivo. Tal vez sea el tema más intenso y heavy del disco, con potentes guitarras que siguen sin ocultar el trabajo de teclados que acompaña la canción perfectamente. Dura, potente y machacona se aleja del clásico power melódico para ofrecer unas melodías diferentes. Complicadas de entender por su rotundidad pero interesantes. ¿Podemos acabar recordar a EDGUY con ellas? No sé, no sé…
«Return of Salieri» es la última canción instrumental del álbum y personalmente la que más me gusta. Mucho más compleja y rapidísima. El sonido del teclado es más variado y la velocidad conferida por la batería de Mirka Rantanen la convierten en uno de los momentos mejores del disco. A veces no es necesario incluir una voz para hacer un gran tema, y este es uno de ellos. Lauri Porra y su bajo también tienen su momento de brillantez, en el que el bajista de TUNNELVISION nos demuestra que ese oculto instrumento que a veces parece ser el bajo tiene también virtuosos que lo dominan a la perfección. Una gozada para los amantes de la música con mayúsculas.
El disco llega a su final con «Somebody´s watching me» un extraño experimento de un tema ochentero que llegó a ser cantado en su día por Michael Jackson. Eso sí, la participación vocal de Alexi Laiho hace que sea una canción popera «algo» diferente. Desde luego el espíritu de los COB aparece al final del disco aunque no sea una canción que brille precisamente en el conjunto de las demás
En definitiva un disco variado con excelentes momentos de música de gran envergadura, aunque decaiga por la elección de alguno de sus temas. Por lo pronto la versatilidad de Warman queda demostrada de nuevo y sin duda los amantes del power melódico con influencias progresivas disfrutarán de algunos momentos excelentes. No obstante el disco resulta demasiado heterogéneo y eso es lo que puede acabar por lastrarle.
TRACK LIST
1. Accept The Fact
2. Invisible Power
3. Waters Of Lethe
4. Roppongi Rumble
5. They All Blame Me
6. Puppet
7. Lying Delilah
8. Return of Salieri
9. Somebody’s Watching Me
Fernando Checa
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