Decir de antemano, que DARK TRANQUILLITY son una de mis debilidades. Es uno de esos grupos, con una amplia trayectoria a sus espaldas, y que jamás me han decepcionado. Las etapas de su carrera, están bien diferenciadas, y con «Character» es como si cerraran un ciclo, un ciclo que acaba donde lo comenzaron. Skydancer fueron unos inicios devastadores, la mezcla perfecta entre Death Metal y melodía, con una base ultra compleja, difícil de asimilar. «The Gallery» y «The Mind’s I» fueron la panacea en su estilo, dos obras que los encumbraron dentro del underground, siempre a la sombra de IN FLAMES, pero mostrando una mayor autenticidad; «The Gallery» es una de las obras más imprescindibles que te puedes echar al saco. «Projector» y «Haven», supusieron un cambio, una ruptura premeditada hacía terrenos más experimentales. Se dejaba entrever la voz clara de Stanne, y la inclusión de teclados de la mano de Martín Brändstrom (el doble de Timo Tolki). El nuevo camino encauzado, dejaba ver lo peor, recordando a los casos de PARADISE LOST (con «Host») y de MOONSPELL (con «Butterfly Effect») entre otros. Pero no, se reinventaron y sacaronde la manga «Damage Done», conservando algunas cosas más recientes, pero recuperando la mala ostia de antaño.
Y ahora señores, tenemos «Character», no puedo imaginar un título más apropiado. Han vuelto a escuchar «The Gallery» unas cuantas veces, y han vuelto a retomar esa senda brutal y melancólica, llena de ira y desolación. Todo ello, sin perder su identidad, sin engañar a nadie, conservando destellos de sus influencias acumuladas a lo largo de sus trabajos. Eso se llama tener carácter.
Cositas a destacar, sobretodo, que la primera impresión fue un tanto indiferente, chocaba el sonido de las guitarras, y algunos temas no entraban con facilidad. Nada que tres escuchas en profundidad no puedan solucionar, así que paciencia, que esto es dinamita. Otra cosita, que los teclados de Martín han perdido protagonismo, siguen estando ahí, pero de una manera más ambiental, menos experimental. Y sobre todo, que Mikael Stanne, vuelve a demostrar de lo que es capaz. Su voz es un privilegio de la naturaleza, desde «The Gallery» no había vuelto a reventarse a si mismo de esta manera, su voz suena brutal, plagada de odio, que se reconozca que es uno de los mejores voceras del género.
Lo que son los temas, pues comentar que todos tienen un nivel altísimo, y de paso, elevar un par o tres a los altares. «The New Build» empieza con un blast beast, un corte que podría estar presente en «The Mind’s I». Un chorreo inmenso de guitarras armónicas, batería a todo trapo, cambios de ritmo, intensidad…. de todo lo que hace que DT sean tan especiales. El sonido es notable, pese a ser grabado en los ya cansinos estudios Fredman de la mano de Fredrik Nordstrom.
«Through Sumudged Lenses», por los pequeños toques de teclados, está más próximo de «Haven». Los solos de Martín Henriksson y de Nikas Sundin, son breves, y suenan un tanto apagados entre la marea de brutalidad melódica, no así las armonías dobladas, algo que se ha hecho premeditadamente imagino.
«Out Of Nothing» sigue emanando destellos de «The Mind’s I», Stanne canta de forma más aguda en esta ocasión, y los teclados ganan confianza en forma de piano interlúdico en un puente que nos lleva a un estribillo denso y rabioso. Nuestras orejas son como una pelota de ping pong, de un extremo a otro. «The Endless Feed» sirve para pisar un poco el freno, es de los más extraños, con reminiscencias de «Projector», partes machaconas, samplers, y unos arreglos de tecladolo convierten en el patito feo, pero quien sabe si con el tiempo será un cisne con cuernos.
«Lost To Apathy» vuelve a bajarnos al puto Infierno, demencial y brutal, estribillo completamente perfecto; supongo que habréis experimentado esa sensación de rabia, de escuchar un tema y que el corazón se te acelere, la adrenalina suba, y te den ganas de reventar alguna cabeza de algún infiel cualquiera. Pues aquí tenéis un ejemplo de lo que el Metal es capaz de conseguir, ALEJAOS DE ÉL PECADORES!!!!!!!!!!!!!
«Mind Matters», otra en la frente, más accesible y «comercial», con un riff en el estribillo brillante, y rítmicas aceleradas, como en todo el trabajo. «One Thought», suena al principio un tanto repetitiva con lo escuchado anteriormente, pero para eso sirven los cambios de ritmo, para descolocar al personal. Destacar la labor de la batería de Anders Jivarp, tanto en directo como en estudio es sublime. Es de esos «mendas», que los ves tocar y parece que sea fácil, que hacen las cosas sin esfuerzo, sin inmutarse.
«Dry Run» muestra una forma de cantar de Stanne hasta ahora desconocida, alcanzando cotas de brutalidad y mala ostia bastante elevadas. Es un corte más lento, donde la voz y el piano se llevan el protagonismo en la estrofa, y las guitarras ultra veloces en lo demás. Este es un trabajo inspirado, lleno de matices y detalles, hay que explorarlo bien. «Am I 1», tiene un riff muy Power, de esos cortes que te elevan y te bajan, dependiendo del momento, pero como siempre, la cota de intensidad en estos suecos está por las nubes.
«Senses Tied», brutal y veloz. Y para cerrar «My Negation», un extenso tema de seis minutos y medio, extraño y experimental. El tono de Stanne a veces parece Black. Un corte oscuro, denso y melancólico.
Todos sus trabajos son inmensos, son una súper banda que no creo que esté todo lo reconocida ateniéndonos a sus méritos. Un trabajo espeluznante de la banda más intensa del planeta. Solo me queda sentir lástima por todos aquellos a los que no les gusta el Metal, jamás podrán sentir lo que se siente al escuchar a bandas del calibre de DARK TRANQUILLITY. Es una pena.
Àlex Sánchez (Era del Metal ‘zine) – alex_sanchez @rafabasa.com