ARS AMANDI + ESTRAGO y SINKOPE. Presentación en Madrid

Viernes 28 de Mayo – Sala Divino Aqualung – Madrid

Hacía mucho tiempo, creo que prácticamente es
la primera vez en mi vida, que no iba aun concierto a las seis de la tarde.
Con un calor de mil demonios llegamos a la Sala Divino un poquitín antes
de lo establecido, lo justo para tomarnos unas cervecitas, comprar cigarrillos
y charlar con los fotógrafos del staff, que hacía tiempo que no
nos veíamos.

A las seis de la tarde estábamos clavados en la barra
del Divino, totalmente decepcionados ante un público prácticamente
inexistente. Algún que otro cenizo ya se atrevía a augurar lo
peor, por suerte eso no fue así y conforme se acercaba la hora de actuación
de ARS AMANDI la sala se iba llenando paulatinamente, despacito
pero sin pausa.

Puntuales y con muchas ganas para la escasa audiencia que tenían
en frente, comenzaron los pamplonicas ESTRAGO. Yo me emocioné
con su introducción, sonando el ultimo mohicano a todo trapo y ellos
en pose muy profesional, así de espaldas al publico y esas cosas… Luego
el mito se derrumbó cuando vi al cantante embutido en unos pantalones
de vaca, con un sombrero de cowboy del mismo estilo y una chupa vaquera. Se
que las comparaciones son odiosas pero me recordaba al frontman de los Mojinos
Escozios, eso si, un poco (bastante) menos obeso.

Al tiempo que tocaban en la sala comenzaba a llenarse de una
manera muy lenta y yo cada vez me sentía más mayor viendo la media
de edad que pululaba por la sala. Es obvio, una banda joven por lo general atrae
a gente joven, y eso es bueno, pues te das cuenta que esto del rock jamás
habrá quien lo pare.

ESTRAGO sonaron bien, aunque para mi gusto
la guitarra principal estaba demasiado alta y su música, basada mucho
en el punteo, me chirriaba un poco en la cabeza. Ellos se lo pasaron bien y
consiguieron dar el ambientillo que la sala necesitaba a esas horas, un grupo
de rock mas o menos cachondete pero contundente. Destacar de ellos un temita
que se llamaba algo así como «Princesas de la salve y esquina»
en el que salió una gogó a bailar con ellos, «Rosa Negra»,
«Algún día» y versión de «Video kill
the Radio Stars» que al grito de Marihuana animó al publico caldeando
bastante los ánimos.

Buen debut para este grupo navarro, veremos que les depara
el futuro. El apoyo lo tienen, pues son numerosas las voces que se han elevado
en su favor, concretamente las principales bandas de su tierra. ESTRAGO
son potentes, tienen una base bastante heavy combinada con aderezos de humor
que se pueden apreciar en las letras de sus canciones y en la actitud del grupo
sobre el escenario. Ellos fueron todo sonrisas, una dura batalla por animar
con su música a un público que no superaba las tres decenas de
personas… A pesar de las condiciones adversas de su actuación lo consiguieron
cumpliendo perfectamente con la labor de un telonero, entretener a la audiencia
con su música al tiempo que se acerca la hora de la actuación
principal.

Tras ESTRAGO le llegó el turno a los
extremeños SINKOPE, un grupito bastante más alternativo.
Tuvieron un detalle y fue empezar al igual que empieza «Acero y Sangre»
de Muro, pero a partir de allí la palabra metal desapareció totalmente
y solo quedó un rock totalmente poético, muy rítmico y
muy maduro musicalmente. Eso si, poco que ver con nuestro rollo. El público
comenzó bastante parado, no sabía de que iba la vaina, hasta que
los primeros fans de dicha banda comenzaron a llenar el hueco. En el segundo
tema ya recibieron los primeros aplausos y el calor del público, ya fue
coser y cantar para el grupo a partir de allí. La gente fue a pasárselo
bien y eso es lo que hizo con el sonido de SINKOPE. Homenajes
a Sabina, canciones populares, manifiestos políticos en verso o en prosa
fueron combinados con canciones de un corte parecido al de ExtremoDuro en lo
referente a las letras y a cualquier grupo moderno de rock duro en cuanto a
ritmo. Hubo quien se atrevió a augurarles una enorme carrera, ya veremos
que les depara el futuro…

El momento deseado por muchos llegó al fin tras una
lógica espera para adecuar el escenario para el grupo principal. ARS
AMANDI saltaron para darlo todo en la presentación oficial
de su álbum. «En tierra Firme» y a partir de allí
todo fue una fiesta. El grupo venía crecido, con todo el derecho a estarlo
debido a su última actuación en Madrid junto a Mago de Oz, donde
triunfaron y ganaron muchísimos seguidores. Ese empujón ha sido
lo mejor que le ha pasado a su carrera y lo están sabiendo aprovechar.

Aqualung contaba con aproximadamente la mitad de su aforo
lleno, podía haber sido más pero sorprendió la gente que
acudió al concierto, pues el panorama inicial era completamente desolador.
Destacar la labor del cantante, que no flaqueó en ningún momento
y como no, la voz de la experiencia que otorga a un grupo contar con un batería
como José Martos (Niágara) que sonó de maravilla. Recuerdo
que casi devoro a una a una chiquilla acreditada por una radio que comentándole
lo bien que sonaba (la batería) ella me decía «Pero si es
aburrida, si suena todo el rato igual…» y luego en cuanto sonaba la
dulzaina se ponía bailar como una loca. No nos podíamos quejar
del sonido para nada, quizás un poquito sí de la dulzaina, estaba
un poquito alta y la verdad había veces que daban ganas de arrancarte
las orejas. Si bien es cierto que esta es una opinión totalmente subjetiva
por que cada vez que Dani entonaba el instrumento el público se volvía
loco y no paraba de botar, bailar y aplaudir.

El show de ARS AMANDI fue sencillo pero efectivo.
Todo salió a la perfección y todos mostraron una dedicación
y un espíritu que hace honor al nombre del grupo. Toda la formación
parecía estar muy unida y entregada a lo que estaban haciendo. No hubo
poses, no hubo efectos especiales, solo hubo rock y una comunión sincera
con el público. La decoración del escenario era simple, tan solo
un par de llamitas (papel) moradas a los lados del batería que otorgaban
un poquito de misticismo al ambiente. Ellos tampoco necesitaron disfraces ni
nada por el estilo, el único que aparecía mas maqueado de lo normal
era el cantante, ataviado así con una gabardina negra y camisa blanca.
Eso si, llevaba unos botines mazo de guapos.

El Show empezó con «Déjame tu ley»
y «El autor». Ya solo con estos dos temas vimos las ganas que tenía
el público de pasárselo bien y disfrutar con la música
que ha venido a escuchar. Madrid estaba con ganas de fiesta y el grupo parece
ser muy querido por aquí. En todo momento en que Dani desenfundaba su
dulzaina la gente se volvía loca y comenzaba a botar, convirtiéndose
esto en tónica general a lo largo de todo el concierto.

Tras las dos primeras canciones le llegó el turno a
una canción que demuestra lo serio que es esto del Rock. Otra canción
más dedicada a los malos tratos a la que, en su preámbulo y presentación,
se invitó a los maltratadores a subir al escenario para decirles un par
de cositas. Con aplausos comenzó «Que esperamos» seguida
inmediatamente de «Imperio traidor». «Camino sin fin»
fue cantada y coreada por todo el publico, siendo una de las más emotivas
del concierto.

Primera ronda de invitados que no pudieron acudir…Oscar,
de Lujuria, no pudo asistir al compromiso con la banda pero dejó claro
que le hubiera encantado estar allí. Es de saber que el segoviano apoya
y apadrina con gran cariño a estos chicos de ARS AMANDI ,
como personalmente he podido comprobar en varias declaraciones suyas. Así
pues «El cazador» se quedo sin estrella invitada, sonando aún
así igual de bien, por supuesto.

«Abula «me hizo bailar hasta a mi; la melodía
de la dulzaina afectaba a mis pies y me entraban ganas de mover el esqueleto.
Así pues, me bajé un ratito al mogollón y disfruté
como un enano con la peña entre los cuales estaba mi hermana pequeña,
que va entrando en esto del heavy con muy buen gusto. Por cierto, muchas gracias
a Martita que me sirvió de gran ayuda a la hora de redactar esta crónica.
Ella era el reflejo de todo el público, con una cara sonriente y una
voz afónica al terminar el concierto, totalmente emocionada por disfrutar
de un concierto de estas características…me recordaba a mi mismo cuando
salí del concierto de AC/DC en Las Ventas…

«La mirada perdida» y «El altar» precedieron
a uno de los temas estrellas del nuevo disco «No queda si no batirnos»
dedicado al magnifico personaje de nuestra literatura que es El Capitán
Alatriste.. Este tema fue un regalo de Txus, de Mago de Öz para ARS
AMANDI . Desgraciadamente otros compromisos le impidieron acudir como
invitado también. Una vez más la ausencia no se notó pues
el público se volvió loco con esta canción de preciosa
letra.

Los asistentes estaban como locos después de esta dosis
de buen rollo y bailoteo. «Ven hacia mi» fue coreada de principio
a fin para encender después los mecheros con «Malos recuerdos»,
tema dedicado a los abusos infantiles.

Un invitado que si acudió fue Manolo Arias acompañando
a la guitarra para participar en el aclamado single «Escuchando al corazón»
que fue todo un éxito, tanto a nivel sonoro como festivo. El público
se entregó, una vez más a la magia de ARS AMANDI ,
bailando, cantando y pasándoselo bien con los músicos. La canción
quedo ciertamente empañada por el protagonismo robado por parte de un
«famoso»espontáneo que no se le ocurre otra cosa que subirse
a bailar, cantar agarrando del micrófono al cantante y dar instrucciones
de sonido, innecesarias por lo que yo creo, a los técnicos mientras el
grupo entonaba el himno del disco que habían venido a presentar.

«Imaginate» con un bonito preámbulo fue
la puerta de entrada para la ultima canción antes de los bises. «Abre
la puerta niña», versión de Triana fue la elegida para despedir
el concierto.

Los bises llegaron y de que manera. Cuatro temas, con un frontman
ya en camiseta fueron la apoteosis final de esta fiesta de folk y rock. «Testigo
mudo», «En tierra firme» y «La suerte está echada»
fueron el regalito de ARS AMANDI para sus fans. En esta etapa
del concierto se dio la noticia de la futura paternidad de Alberto, al cual
deseamos mucha suerte desde www.rafabasa.com en esta nueva etapa de su vida.

ARS AMANDI triunfaron de nuevo, no hay duda,
y esta vez por su propio pie como cabezas de cartel y una banda que comienza
a ganarse el prestigio tanto de el público como de los medios de comunicación,
que eran muchos los que habían allí reunidos. No llenaron la sala,
no son Mago de Oz (aun), pero ofrecieron un concierto en el cual la peña
salió encantada, sonriente y con muchas ganas de continuar la juerga
por los distintos locales madrileños.

Texto: Daniel Pastor
Fotos: Diego L. Pérez

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