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Tras el concierto acústico de la pasada noche de jueves
en la que JEFF y su banda nos ofrecieron lo mejor de sí
mismos, brillantez, calidad y entrega, además de la gran voz de SOTO
y sus «coristas» Gary Schutt y Howie Simon, por cierto inconmensurables,
el plato fuerte se presentaba suculento, y así fué.
Los madrileños NEXX abrieron fuego,
con elegancia, feeling y prestancia, con una Patricia encantadora y empeñada
en sonreír y agradar, con una segura voz que tristemente se oía
en un plano bastante escondido entre el resto de instrumentos, lo cual particularmente
me enojó ya que la joven vocalista posee una estupenda y a la vez armónica
voz que mereció más esta noche. La banda se apoya en gran manera
en la impecable labor guitarrera de Bernardo Llobregat. Fueron inteligentes,
ya que dejaron para la mitad y final de su show sus mejores temas, como «Get
Fire», buenísima canción, o «Remember», otra
de mis favoritas. En su día Diego Pérez fue quien hizo la
review de su flamante álbum «Colours», por lo que es ahora
el turno para confirmar mi modesta opinión sobre el redondo: es uno de
los mejores álbumes de rock melódico que he escuchado estos últimos
meses, sin duda. Tenía gran hambre por verlos en vivo, y me gustaron
en su actuación, aunque, sinceramente hubiera parte del respetable que
dijera que no fue de sus mejores noches.
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Lo de JEFF SCOTT SOTO fue impresionante, sublime,
gigantesco. Más de dos horas de poder, sentimiento, pasión y entrega
total. JEFF no paró de sudar, moverse, vivir cada estrofa
y ritmo. Posee esa personalidad arrolladora propia solo de los grandes dioses
de las cuerdas vocales; supo impregnarnos de su magia, y así lo hizo
desde el principio. Se metió al público en el bolsillo que llenó
a rebosar la sala, cantó rotundamente bien, no paró de trabajar
sobre el escenario, disfrutando de la respuesta de unos fans que dejaron
claro que ni ingleses, ni alemanes, ni gaitas. Los nacidos en éste país
somos los más calientes y, lo más importante: los más fieles
seguidores de SOTO, algo que vivió en sus carnes JEFF
y la banda, por lo que la entrega de éstos fue bestial.
Sonaron sus mejores temas en solitario, varias versiones como
«Long Train Runnin», donde Simon demuestra lo buen vocalista que
es, cortes de TALISMAN, himnos recordando su paso por YNGWIE, como «I´ll
See The Light Tonight», dentro del medley similar al del cd en directo
y hasta un poco de funky. Alternaron el poder eléctrico con el sentimiento
del acústico.
Para mi particularmente fué un conciertazo que difícilmente
olvidaré, y del que hablaré profundamente en una crónica
más extensa y con muchas fotos, en breve.
De momento, sirvan éstas líneas como crónica
de urgencia.
Texto y Fotos: Rafa Basa
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre
ellas.
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