+MOONLIGHT FEAR 15 de Febrero 2003 Sala CARACOL
SE VISTE DE BLANCO Y VERDE.
Así fue; la pasada noche del 15 de Febrero la madrileña sala
Caracol se vistió de blanco y verde, los colores de la bandera andaluza,
ya que ambas bandas venían de esa comunidad autónoma. Moonlight
Fear son de Jaén y Saurom Lamderth de la Tacita de Plata (Cádiz),
pero además, con permiso de l@s andaluces y andaluzas, todo el público
allí presente se apropió de esos colores, el blanco para pedir
PAZ (much@s eran l@s que venían directamente de la manifestación
que, tranquilamente, dijo que NO QUEREMOS LA GUERRA) y el verde para
traer esperanza a este mundo que se ha vuelto loco y dónde parece importar
más el dinero (no os engañéis la guerra que pretenden empezar
en Irak es por motivos PURAMENTE económicos) que la propia vida. Afortunadamente
cada vez somos más los que no pensamos así y, esa tarde, los pueblos
tomaron las calles para decir a sus gobernantes lo que pueden hacer con su guerra.
Saurom Lamderth tuvieron el detalle de invitarme a colaborar en su disco
y a participar en este concierto, honor que compartí con Silver, Elisa
de Dark Moor, Víctor de Warcry, Ángeles Lago de Crazy Cabuxa y
Darío e Ivan de Eczema, una vez más me planteo que no estaría
mal contaros lo que pasa por dentro en un concierto de estas características
y, una vez más, Rafa accede a que os escriba estas líneas.
Con el tiempo justo y todavía resonando en mi cabeza aquello de «Aznar,
confiesa, Bush te la pone tiesa» o «Aznar, capullo, que vaya un hijo
tuyo» llego a las inmediaciones de Caracol y me encuentro con los chicos
de Cuatro Gatos (a excepción de Iván) con quienes me piro a papear
un poco. Durante la cena me cuentan cómo se están preparando el
acústico que tocarán el próximo 21 en la fiesta que rafabasa.com
tiene preparada en el cada vez más concurrido Star y, aprovechándose
de que tengo algo de fiebre por la puta gripe, me vacilan sin que, esta vez,
pueda con ellos. Los muy cabrones querían publicar el hecho bajo el titular
de «Cuatro Gatos se comen al león» ja ja ja, la verdad es que
lo pasamos bien.
Cuando entro en Caracol ya están sobre las tablas los jienenses Moonlight
Fear interpretando «Entre hielo y fuego». No quiero pasar por
encima este grupo con cuatro líneas para centrarme en los Saurom, este
grupo merece que hagamos un alto. Tienen dos tesoros en las fundas de sus guitarras:
calidad y juventud; estoy seguro que van a llegar muy lejos. Su cantante, José
A. Díaz, tiene una magnífica voz, con mucho potencial, sus guitarras,
Juan Ramírez y Fran Suárez, pasean por el mástil sus dedos
con la misma soltura, belleza y precisión que Naomi Campbell (la pantera
negra) lo hace en una pasarela; y el resto del grupo (Txus, batería -no,
no es el de Mago pero se llama así-, Guille Vilagrassi, bajo, y Javier
Expósito, teclado) cumplen a la perfección con su cometido.
Salvados los primeros instantes en los que los asistentes tomaban contacto
con la banda, la peña disfrutó con los chicos.
Sonaron «Nadie a tu lado», «Nuevo Destino» y «la Rosa
y la Estrella» entre otras, temas de su maqueta que pronto estarán
en un disco ya que la discográfica Red Dragon Records se ha hecho con
sus servicios. Os aconsejo no perderles la pista ya que tienen todo el potencial
del mundo por delante. Para terminar su actuación tocan «Al pie
del cañón» una versión de Panzer que a mí me
encantó, la van a incluir en el homenaje que Red Dragon prepara a esa
banda, la lástima es que, por incluir este tema, sacrificaron «Alas
de Metal» mi tema favorito de su maqueta pero dio igual, cuando se bajaban
del escenario, ya tenían un montón de nuev@s seguidor@s , ¡A
ver cuando sale el disco!
Se acerca la hora de los juglares, en el descanso me encuentro con Pacho de
Ankhara que está como un niño con zapatos nuevos con su último
trabajo, para mí el más maduro de ellos, ¡suerte chicos!.
Dentro del camerino está Elisa, esta chica es todo un encanto y siempre
es un placer charlar con ella. Dentro, una pregunta empieza a ser insistente
¿dónde está Silver?, mientras aparece Kiko de Beethoven
R. Que va a cantar el tema en el que colabora Víctor ya que éste
(al igual que Ángeles Lago) no han podido venir.
Narci, cantante, guitarra y flautas de los Saurom, me pide que salga
a presentarlos para explicar su problema con la voz a pesar de que han comunicado
a todos los medios el problema, (realmente una putada) Su voz necesita un reposo
de, al menos, seis meses, debido no sólo a su actividad como cantante
sino también a su profesión, es profesor de música y claro,
su voz no ha podido más. Desde aquí te deseo la más pronta
recuperación posible, SE PERFECTAMENTE lo que estás sufriendo
y admiro mucho tu entereza al sobreponerte, buscar un cantante para este período
y subirte al escenario a tocar la guitarra y las flautas, ¡que Zaluster
te guíe hermano!.
Como decía, Narci me pide que explique a la peña lo ocurrido
y lo hago encantado, el concierto empieza mientras en el camerino seguimos de
charla y con la misma pregunta, que ahora tiene alguna palabra más ¿dónde
HOSTIAS está Silver?.
Sobre las tablas hay un nuevo juglar, el Peri, un gaditano (como el resto de
los Saurom) que fue cantante de un grupo llamado YYZ pero que llevaba 9 años
sin subirse unas tablas ¿creéis que se notó? Este tío
tiene más sal que el mar Muerto, en 5 minutos estaba sobre el escenario
como en su casa, derrocha simpatía y esa gracia gaditana a raudales y
cumple con su cometido perfectamente. El grupo está a gusto y el concierto
empieza a ser la habitual fiesta que montan los chicos, en camerinos se prepara
la primera colaboración, Kiko está listo y sale a cantar «Trancos/Aragorn»
mientras la pregunta ya ha aumentado mucho su número de palabras, ahora
es algo así: «¡¡¡¡Me cagüen la puta
pero dónde cojones se ha metido el Silver!!!!?.
En escena también está la coral, formada por dos chicas y un
chico que también son profes, ¡cuándo suba yo va a haber
más profes en la Caracol que en el Ramiro de Maeztu!. Es el momento de
que Jose, cantante de Moonlight Fear, suba, invitado por Saurom, a cantar con
ellos. En el camerino la pregunta es ya casi una novela: ¡Joder, hay que
joderse, pero es que nadie sabe donde cojones puede haberse metido el **** ****
de Silver que no aparece!!!!!!!!!!!!!!! Por fin suena el móvil de Alfonso
(de Red Dragon) Silver viene desde la mani y anda atascado pero viene fijo.
Sin embargo llega su tema «De Hobbiton a los Gamos» y el grupo tiene
que interpretarlo sin él. Mientras, en el camerino, seguimos paso a paso
el acercamiento de Silver. Es el turno de Darío e Iván de Eczema
que van a interpretar «Los jinetes Negros (Nazgul)», el resultado
es demoledor e impresionante y estos chicos consiguen ponerte la piel de gallina
con sus impresionantes voces y esas larguísimas melenas que mueven de
un modo asombroso, realmente me gustó este tema.
Mientras Elisa se prepara para «La dama de Lórien», aparece
el Silver, rápidamente se decide entre bastidores que se repite su tema,
esta vez con él sobre el escenario. Elisa ha bordado su canción
(¡que gran voz!) y Silver sube al escenario. Caracol entera grita «¡que
vuelva Muro!» y a Silver se le dibuja una sonrisa, el 8 de marzo estará
en Aqualung abriendo para Saratoga con su nuevo proyecto Silver Fist, ¡habrá
que ir!
A mí me tocaba en el bis, ya me he cambiado y estoy listo y estos gaditanos,
siempre con ganas de broma, acaban, bajan y se quedan conmigo: «Pisha que
vamos mal de tiempo, saltamos tu tema y hacemos fiesta, anda, descámbiate»
La cara que pongo debe ser similar a la de un bizco inflando un globo porque
todo el mundo se descojona, «que es broma pisha» y salimos a tocar
«La posada del poney pisador». Tras ésta, es el momento de
cerrar la actuación con un tema de su disco anterior «El guardian
de las melodías perdidas». De éste disco sonaron algunos
temas más como «El saltimbanqui» o «La danza de Nathaniel»
pero el que va a cerrar, no podía ser otro, es «Fiesta». ¡Y
anda que no se lió! En el escenario tod@s l@s invitados bailando como
locos, los chicos de Cuatro Gatos, Kimberly de Heavy Rock, vestida de hada para
la ocasión con una amiga igualmente ataviada, el Peri, feliz con el deber
cumplido, que no paraba de enredar a todo el mundo y el Narci, por fin, sonriente
tras pasar esta primera prueba de salir al escenario y aguantar sus ganas de
cantaros todos y cada uno de los temas.
En definitiva un gran concierto y una gran fiesta, creo que ambas bandas tienen
un gran futuro por delante. Cuando me bajo, me cruzo con una chica que lleva
pintado el símbolo de la paz en la frente y creo que no hay mejor manera
de despediros: PAZ.
Oscar Lujuria.